Desde la época de Constantinopla, se ha mantenido la gran importancia de la ciudad como núcleo urbano. En la actualidad, están registradas en Estambul más de 15 millones de personas.

El ambiente en Estambul es muy agradable y los turistas poseen grandes privilegios. Uno de los aspectos que debéis tener en cuenta a la hora de visitar las mezquitas es que es necesario vestir con ropa recatada, es decir, se deben llevar pantalones por debajo de la rodilla. En el caso de las mujeres, además deberán ponerse un pañuelo en la cabeza.
Estambul tiene muchos lugares escondidos que merecen la pena visitar, desde grandes monumentos históricos, parques en los que relajarse, numerosos museos, hasta emblemáticos lugares que marcaron la época bizantina de Estambul, como sus palacios y mezquitas.

En esta ciudad es imprescindible visitar:
Basílica de Santa Sofía
Este es quizá el edificio más conocido y emblemático de la ciudad de Estambul. Comenzó siendo una basílica patriarcal en el año 360, posteriormente una mezquita en el 1453, y a día de hoy es un museo, desde 1931.
Este edificio ha visto las múltiples transformaciones de la ciudad, así como las diversas civilizaciones que han pasado por ella. No cabe decir que merece una visita obligatoria, para dejarse maravillar por su cúpula, la más importante de la arquitectura bizantina. Fue durante nada menos que mil años, la catedral con mayor superficie del mundo.
Torre de Gálata
Otro icónico lugar y parte imprescindible del landscape de Estambul. Cuando fue construida, se trataba del punto más alto de la ciudad, y al igual que la basílica de Santa Sofía, ha sido testigo de cientos de años de historia de la ciudad.
Fue construida inicialmente en 1348 por los bizantinos, y fue destruida en varias ocasiones, volviendo a ser construida posteriormente. La primera versión de la torre fue construida en madera, y servía de torre vigía de la ciudad.
Gran Bazar
Con más de 58 calles y 4.000 tiendas en su interior, se trata de uno de los bazares más grandes que existen, así como el bazar cubierto más grande del mundo. Fue construido en 1468, y a diferencia de los dos edificios anteriores, éste fue construído por los otomanos, con la intención de proporcionar más servicios a la ciudad después de la conquista. Venir aquí es toda una experiencia, literalmente puedes perderte entre sus calles y no saber por dónde entraste.
Los precios son un poco altos si los comparas con otros sitios, de hecho, te recomiendo ir a las tiendas que están en el exterior, alrededor del Gran Bazar, si quieres comprar algo de ropa por un precio inferior. Está abierto prácticamente todo el año.
Mezquita Azul
Construida en 1609, la Mezquita Azul no deja a nadie indiferente. Se encuentra justo enfrente de la basílica de Santa Sofía. Tiene un aforo para 10.000 personas, lo que la convierte en una de las mezquitas más grandes de la ciudad. Actualmente sigue en uso, por lo que se puede visitar sin pagar entrada. Para ello, hay que entrar por una parte especial para turistas y respetando las normas de decoro.
Bazar de las especias
Cuando paseas por este mercado construido en 1663, la mezcla de colores y de aromas te transportan a otra época. Es el mejor lugar para comprar frutos secos. Es una oportunidad única, no dudéis en comprar en este lugar. También podéis encontrar:
• Té de muchos tipos a granel,
• Especias de todo tipo
• Algún dulce típico de la cultura islámica en general.
Cisterna Basílica
La cisterna más grande de las más de sesenta que se encuentran debajo de la ciudad de Estambul. Fue construida en el año 532, bajo el imperio bizantino, buscando una forma de garantizar las reservas de agua en caso de ataque.
Está justo debajo del barrio de Sultanahmed, a escasos metros de Santa Sofía. Esta cisterna ha servido como escenario de numerosas películas, entre ellas Desde Rusia con amor, de James Bond (1964). En ella podréis ver las bases de dos columnas que reutilizan bloques tallados con el rostro de Medusa.
El origen de las dos cabezas es desconocido. Se cree que las cabezas fueron traídas a la cisterna tras ser retiradas de un edificio del último periodo romano.
Mezquita de Suleiman
La mezquita de Suleiman es la mezquita más grande de Estambul. Construida en 1550 por orden del sultán Suleiman I. Este lugar te dejará fascinado por sus cúpulas y por su grandeza, contando con un extenso jardín exterior. Al igual que la Mezquita Azul, puede ser visitada sin pagar entrada, al ser considerado un lugar de culto.
Mezquita de Eyüp Sultan
No es muy conocida y está apartada del centro histórico. Para ir, quizás la mejor opción es coger un autobús desde la estación de autobuses de Eminönü. ¿Qué tiene de especial esta mezquita? Pues que después de La Meca, es el edificio más importante para el Islam. Fue la primera mezquita construida en Estambul (1458) tras la conquista otomana (1453).
Algunas de las pertenencias personales de Mahoma se encuentran en el interior de la mezquita. Otras pertenencias se encuentran en el Palacio de Topkapı y en otras mezquitas de Estambul. Esto se debe a que Estambul fue la última capital del califato.
Palacio de Dolmabahçe
El palacio sirvió de principal centro administrativo del Imperio otomano de 1853 a 1922, exceptuando un período de veinte años (1889-1909) en el que se usó el Palacio de Yıldız. En él murió el fundador y primer presidente de la Turquía moderna, Mustafa Kemal Atatürk. El palacio se encuentra en la costa europea del Bósforo. Vale la pena ir y verlo por dentro, así como el Harem.
Palacio de Topkapi
Este palacio fue el centro administrativo del Imperio otomano desde 1465 hasta 1853, año en el que fue trasladado al Palacio de Dolmabahçe, descrito antes. La construcción del palacio fue ordenada por el sultán Mehmed II en 1459, y fue completada en 1465. El palacio está situado entre el Cuerno de Oro y el Mar de Mármara. Desde él se tiene una espléndida vista del Bósforo.
Está formado por muchos pequeños edificios construidos juntos y rodeados por cuatro patios. En la actualidad, el Topkapi es un museo de la época imperial. En él, encontrarás todo tipo de objetos de la época, ordenados por salas. Es aconsejable alquilar los audios. No os perdáis el mapa de Piri Reis.
No os olvidéis de visitar la Plaza Taksim, que es la principal de Estambul. Desde #afinidadviajera, también os recomendamos comer o cenar, e incluso las dos opciones en Alpek Teras, una terraza con unas vistas envidiables de todo Estambul. Por cierto, el dueño era muy majo y nos trató a todo el equipo genial.

Tampoco os vayáis de Estambul sin realizar un crucero por el Bósforo. El ferri se coge en el puerto. Os recomendamos el oficial, el que cogen los turcos. Id hasta el pueblecito del final. En el barco os ofrecerán té. Escoged un buen día de sol. Bajáis al final y coméis en uno de los restaurantes junto al mar. Buenas vistas. Es un día para olvidarse de la rutina y charlar con tranquilidad. No olvidéis de preguntar la hora de vuelta en el mismo barco.

¡Disfrutad de Estambul! Nosotros volveremos de nuevo…