Angkor Wat o Angkor Vat es el templo hinduista más grande y mejor conservado de las antiguas ruinas que integran el asentamiento de Angkor. Además es considerado por muchos como la mayor estructura religiosa jamás construida y uno de los tesoros arqueológicos más importantes del mundo.
El recinto fue creado a principios del siglo XII. En su interior albergaba a cerca de veinte mil personas y era el centro de la vida política y religiosa de la región. La palabra Angkor viene del camboyano នគរ, Nokor, y a su vez de la voz sánscrita नगर, Nagara, que significa «capital», mientras que la palabra Wat es de origen jemer y se traduce como «templo».
El lugar está rodeado con un gran foso que protege la fortaleza. Además del templo central piramidal de tres niveles y de unos patios concéntricos de forma cuadrangular, hay bibliotecas, templos menores, terrazas integradas entre las torres y dos pequeños lagos en el exterior que resaltan en el frondoso verde. El complejo fue creado con la finalidad de ser la tumba del rey, no era accesible a todos los feligreses y solo podían acceder a él la élite del imperio jemmer.
El templo de Angkor Wat recibe cada año a miles de turistas que viven una experiencia agradable. En 1995, la UNESCO declaró el templo y los alrededores como Patrimonio de la Humanidad.
Cómo llegar
Para acceder al destino, hace falta desplazarse a la ciudad más cercana, Siem Riep. Desde allí es fácil desplazarse a las ruinas, ya sea con un autobús, un tuk tuk o con una bicicleta para los más atrevidos, que sean capaces de soportar el calor. Los tuk tuk pueden llegar a alquilarse por unos cinco dólares si sabéis regatear bien.
La entrada cuesta unos veinte dólares para un día.